"Ganesha" es de una serie de collares realizado con la técnica de macramé, inspirado en los mandalas utilizados, tanto en el budismo cómo en el hinduismo, cómo centros energéticos de equilibrio y purificación que ayudan a transformar el entorno y la mente de quien medita en ellos.
 
El centro de "Ganesha" constituye la gema "labradorita". En su alrededor se encuentran siete piedras, cada una correspondiente a uno de los siete chakras. Empezando con el "onix", el "agata cornalina", el "ojo de tigre", el "cuarzo verde", el "lapislazuli", el "cuarzo amatista" y el "cuarzo rosa".
 
La labradorita permite que los poderes mágicos innatos salgan a la superficie. Aumenta las habilidades mentales e intuitivas. Calma una mente hiperactiva y energiza la imaginación, aportando nuevas ideas. Despierta un sentido de aventura y cambio. Es una herramienta maravillosa para devolver la alegría y la espontaneidad a la propia vida.
El onix ayuda a pensar objetivamente. Estabiliza emocionalmente y ayuda a combatir la depresión, la melancolía y el miedo a lo desconocido. Potencia la meditación.
El agata cornalina ayuda a elevar la autoestima, el bienestar emocional y la confianza en uno mismo. Da energía y motivación para afrontar cualquier reto.
El ojo de tigre es la llamada piedra de la libertad. Ayuda a desarrollar una gran fuerza interior y firmes decisiones. Buena para personas introvertidas. Limpia el organismo a todos los niveles. Atrae buena suerte. Favorece cambios sin rupturas traumaticas.
El cuarzo verde potencia la estabilidad emocional y fomenta un espíritu generoso. Ayuda a armonizar las relaciones interpersonales. Bueno para combatir el estrés.
El lapislazuli es la piedra de la comunicación. Despierta la mente a una conciencia superior y ayuda a pensar racionalmente. Eficaz para controlar desajustes emocionales. Buena para la meditación.
El cuarzo amatista purifica y limpia el cuerpo y la mente. Atrae buena suerte. Aporta paz y equilibrio. Crea armonía y es buena para meditar. Muy indicado en estados depresivos.
El cuarzo rosa promueve el bienestar tanto físico como emocional. Abre el corazon al amor y el afecto. Ayuda a expresar sentimientos con calma. Relaja. Predispone a sensibilidad y belleza. Confiere seguridad en uno mismo y fortalece el caracter.
 
 
El mandala se une al cuello mediante un trenzado recio de cuatro hilos, con un detalle en sus dos terminaciones. Un nudo corredizo imposibilita la caída del colgante y a la vez permite su adaptación a la medida deseada.
 
El trabajo esta realizado con un hilo encerado de 100% poliester, extremamente fuerte, resistente, duradero y de fácil cuidado, de marca Linhasita.